Herbicida natural
A un grupo de pequeños agricultores y horticultores les preocupa las repercusiones de las sustancias químicas en el ambiente y los peligros que estos implican sobre la salud del ser humano. Y es aquí donde un herbicida natural cobra un protagonismo importante.
Existen variedades de herbicidas naturales que se pueden elaborar, todo dependerá de las necesidades que se presenten y los recursos con los que se cuenten. Si eres parte de este grupo de personas y además buscas diferentes alternativas artesanales, este artículo es para ti.
Lejía de cenizas
Como hemos comentado, la preparación de un herbicida casero u otro tendrá relación directa con dos aspectos esenciales. Por un lado, de acuerdo a los materiales e ingredientes que tengamos a nuestra disposición. Y por el otro lado, el tipo de planta que vayamos a tratar o eliminar. En función de esto, te presentamos en las siguientes líneas algunas opciones que pueden ser de mucha utilidad.
Si necesitas erradicar plagas u hongos de manera orgánica, entonces es posible que te sirva el herbicida a base de cenizas de lejía. Su primera ventaja es que es muy fácil de preparar, y su segundo beneficio es que no implicará un gasto importante.
Para crearlo solo hará falta un ingrediente, la ceniza de leña. Esta debe venir de madera dura y que no haya sido tratada anteriormente con productos químicos. En otras palabras, no debería contener ni plásticos, ni materiales sintéticos.
Preparación
- El primer paso es colar la ceniza para separar la verdadera ceniza de los carbones o cualquier otro elemento.
- La medida de cenizas que obtengas deberás mezclarla con la misma medida de agua.
- Revolver durante 5 minutos aproximadamente para que quede como una pasta bastante homogénea.
- Para comprobar que las medidas utilizadas tanto para las cenizas, como para el agua han sido las apropiadas, se deberá realizar una prueba. Esta consiste en tomar una papa o un huevo y sumergirlo en la mezcla final lograda. Si ambos flotan, quiere decir que la mezcla es correcta y se puede avanzar. De lo contrario, la sustancia obtenida no nos será útil.
- Ahora corresponde colar toda la mezcla para separar la parte más líquida de la espesa. El envase debe ser el adecuado para poder agitar. Luego, debemos verter la solución en otro recipiente, en este caso, debería ser uno abierto.
- Dejar reposar por 24 – 48 horas.
- Pasado este tiempo debemos corroborar la división de la mezcla. En la parte superior la solución es menos espesa y es la lejía de cenizas que se utilizará.
- Para extraerla, lo mejor será contar con un nuevo recipiente limpio y una jeringa. De esta manera, no entraremos en contacto con la parte más espesa del fondo.
- Por último, se deberá filtrar el líquido obtenido en el paso anterior en un nuevo envase con la finalidad de separar cualquier sedimento que haya quedado.
- La mezcla final deberá estar compuesta por 1 vaso de lejía por 3 vasos de agua. Vale destacar que en este punto el agua potable o de grifo no es la mejor opción porque puede contar con cal o cloro. En su lugar, necesitaremos agua de lluvia o reposada, y verter toda esta solución en un atomizador.
- Logrado este último paso, se puede comenzar a emplear sin una dosis específica, ya que no supondrá riesgo alguno para las plantas. En cuanto a la frecuencia de uso, bastará con 2 – 3 veces por semana y utilizar durante las primeras o últimas horas del día.
A pesar de que este herbicida es ecológico, puede irritar la piel si existiese un contacto prolongado. Debido a esto, se sugiere la utilización de guantes, gafas protectoras y mascarillas. Para almacenarlo hará falta un espacio con ventilación, recipientes de acero inoxidable, plástico o vidrio, y que cuente con temperatura adecuada.
Si te preguntas ¿qué combate este herbicida?, la respuesta es pulgón, gusanos, cochinillas, araña roja, mariposa blanca y hongos.
Vinagre
El vinagre es un poderoso herbicida natural que puede ayudar para combatir plagas y enfermedades en los cultivos. Sin embargo, para que sea realmente efectivo, hace falta tomar en consideración algunos aspectos.
Para eliminar la maleza, se puede emplear una brocha pequeña o pincel con vinagre y pasarlo directamente sobre las hojas que se quieren eliminar. En este caso no aplica el rocío porque se podría afectar las plantas cercanas.
Vale destacar que realizar este procedimiento no bastará. Es por esto que se recomienda esperar unos días para ver el efecto del vinagre sobre la mala hierba para volver a aplicar. Habrá que continuar con este mismo procedimiento cuantas veces sea necesario hasta que se note la muerte de la maleza.
Otro detalle importante a tener en cuenta es el momento correcto para aplicar el vinagre. Hay que conocer la planta para saber su ciclo de vida. Lo ideal es emplear este producto antes de que haga la semilla.
Por último, pero no menos importante, habrá que contar con rayos de sol y no con lluvia. Mientras el sol ayudará a secar la hoja de la maleza, la lluvia por su parte eliminará el vinagre de la superficie de la planta y por ende, todo el trabajo se habrá perdido.
Purín de ortigas
Para hacer este herbicida natural se debe contar con los siguientes ingredientes:
- Al menos 1 kilo de ortigas tiernas. Estas no deben estar en etapa de floración, tampoco deben contar con tallos leñosos o raíces.
- 10 litros de agua de lluvia.
- Guantes al momento de picar las ortigas.
- 1 bidón de plástico para hacer la mezcla.
Preparación
- En el bidón se ingresan las ortigas y luego el agua.
- Revolver la mezcla con un palo de madera. No usar metal o plástico en este punto porque podría dañar la sustancia final. Esto deberá hacerse por espacio de 5 a 10 minutos diarios. Los primeros 3 ó 4 días corresponden a la etapa de maceración, es decir, cuando los componentes se disuelven. En este punto ya podría utilizarse esta mezcla como fertilizante orgánico o repelente de plagas. La segunda etapa es la de fermentación, la cual dura entre 14 y 15 días. Se notará el final de esta fase cuando se dejen de ver las burbujas sobre el líquido.
- Al finalizar, se recomienda cerrar el bidón para que no ingrese ningún tipo de impureza, pero con una pequeña abertura para pueda ingresar aire y oxígeno.
- Debido a su mal olor, se sugiere ubicarlo en un espacio aislado, ventilado y a temperatura ambiente.
- Con la mezcla lista, se debe proceder al colado. El colador en este punto debería ser de tela y no de metal.
- La solución obtenida debe mezclarse en un nuevo envase con agua de lluvia. Es de recordar que por cada litro de purín de ortigas se tiene que agregar 10 litros de agua.
Es momento de comenzar a regar las plantas con la solución definitiva. No obstante, tienes que saber que el momento ideal para aplicarlo sobre las plantas será cuando estas estén en pleno desarrollo.
Si se necesita como repelente, la proporción ha de ser 1 x 15, es decir, 1 litro de purín de ortigas por 15 litros de agua. Al pulverizar sobre las hojas haremos un repelente perfecto para los pulgones, la araña roja, la mosca blanca y el hongo “mildiu”.
Sal
Así como el vinagre, la sal también puede servirnos como herbicida natural. ¿Por qué?, porque contiene sodio, un componente que la mala hierba y las malezas no toleran. Puede emplearse en puñados de sal o regar como agua salina.
Al aplicarlo directamente en la planta se impide que la misma absorba el agua y los nutrientes de su entorno, lo que provocará un estrés hídrico y producirá su muerte.
Bicarbonato de sodio
Otro de los elementos con los que podemos crear un fantástico herbicida es el bicarbonato de sodio. Hay muchísimas maneras de hacerlo pero a continuación te dejamos una forma que no es ni potente ni invasiva.
En primer lugar necesitaremos:
- Un pulverizador con al menos 1 litro de capacidad.
- 1 litro de agua.
- 1 cucharada sopera.
- Bicarbonato de sodio.
Preparación
- Vertemos el litro de agua en el envase que usaremos para pulverizar.
- Luego se añaden las 3 cucharas de bicarbonato.
- Cerrar el envase y agitar muy bien por espacio de 10 minutos.
- Aplicar de manera foliar y abundante sobre la maleza a eliminar. Eso sí, este paso deberá llevarse a cabo durante las horas del mediodía cuando el calor y los rayos del sol sean más intensos. Evitar aplicar esta sustancia durante épocas de lluvia porque no brindará el efecto esperado.
- El empleo de este herbicida deberá hacerse durante 2 días consecutivos. Y si la planta es muy fuerte, entonces podría agregarse un tercer día de tratamiento.
Como has visto, cualquiera de estos herbicidas naturales son fáciles de preparar, no solo porque requieren de pocos ingredientes, y que en su mayoría tenemos en casa, sino porque los pasos a seguir son bastante básicos.
Te invitamos a hacer la prueba con algunas de estas alternativas antes de adquirir un químico prefabricado que pueda suponer un peligro mayúsculo para tus plantas.