Manguera flexible para el riego agrícola

Cuando se cuenta con un área muy extensa para la siembra y la cosecha, muchos equipos y herramientas se hacen indispensables. Y una de estas es la manguera flexible para llevar a cabo el riego agrícola.

Se trata de un tubo largo pero a la vez muy elástico por el cual fluye una gran cantidad de agua, el cual facilita llegar a lugares alejados para realizar el debido riego. Una de sus principales ventajas es su material de fabricación, el polietileno, ya que le permite acoplarse a diferentes tipos de regadíos.

Instalación de riego con mangueras flexibles

Dependiendo de los equipos y accesorios con los que se cuente, se puede emplear un tipo de riego u otro. Aunque también en este punto debemos comentar que algunos factores externos entran en juego, como por ejemplo: la extensión del terreno a regar, si este es llano o con relieves, y la presión del agua disponible.

Si se cuenta en definitiva con un suministro hídrico constante y eficiente y con una superficie plana podría emplearse una instalación donde la manguera flexible sea la protagonista del acto. ¿Cómo se lleva a cabo?, te lo resumimos en los siguientes puntos:

A lo largo de todo el terreno se deben abrir surcos. Estos tienen que estar obviamente cercanos a la plantación.
Mientras que en un sistema de riego por goteo se requiere de tubos de PVC, aquí hará falta la manguera flexible.
Esta debe colocarse sobre el surco, y no obstaculizarla para que el agua pueda fluir correctamente.
Con la supervisión de un trabajador u operador, se inicia el proceso de riego. La cantidad de agua a emplear por planta, dependerá de las propias características de esta.

Vale señalar que este tipo de riego es el ideal en zonas tropicales, o donde las temperaturas sean muy elevadas.

Enrollador de manguera flexible para el riego agrícola

Debido a la longitud de este tipo de mangueras, se hace necesario contar con un enrollador. Para recogerla cuando no se esté utilizando, protegerla, y para que no interrumpa u obstaculice el resto de labores agrícolas.

Ahora, para escoger el correcto, lo primero que se tiene que hacer es medir la extensión total de dicha manguera, para luego decidir si se elige un enrollador manual o automático.

Con el manual, como ya podrás imaginar, tendrás que recoger la manguera tú mismo.
Mientras que con el automático, el proceso se hará por sí solo. De hecho, es el más recomendado para evitar doblez o nudos indeseados e imperceptibles, lo que alargará la vida útil del equipo, y mantendrá la capacidad de flujo cada vez que se deba utilizar.

Características a la hora de comprar una manguera flexible

Para hacer la elección correcta de tu manguera, primero se deben considerar ciertos aspectos, para evitarte futuros inconvenientes y los cuales te comentamos a continuación:

Material: Independientemente de las condiciones climatológicas y la longitud del terreno, intenta hacerte de una manguera fabricada con un material resistente, como por ejemplo, el poliuretano. Evita las de vinilo o materiales similares solo por el hecho de ser más económicas.
Presión: Si el número de plantas a regar es considerable y la distancia total a cubrir es amplia, se necesitará de un grosor mucho mayor para que el agua pueda transitar libremente y en grandes cantidades.
Longitud: De la mano del punto anterior, no podemos dejar a un lado la longitud. Para elegir el tamaño adecuado deberás medir el área de trabajo completa, para que de esta forma puedas llegar a todos los rincones sin problemas.
Presupuesto: Si cuentas con un presupuesto un tanto ajustado, ciertamente tendrás un poco más de limitaciones. No obstante, investigando en detalle, de seguro podrás hallar una elaborada con un material similar al mencionado anteriormente y que te evite situaciones a posteriori, como un mal funcionamiento, o que debas gastarle en reparaciones cada cierto tiempo.

Tipos de mangueras para el riego por goteo

Las tuberías portagoteros como también se les denomina, suelen elaborarse con 16 mm de diámetros y en polietileno, como ya hemos comentado. Y estas pueden clasificarse en dos tipos:

Manguera ciega: Su estructura es lisa y se pinchan los goteros.
Con goteros incorporados: Se trata de goteros que ya vienen instalados en la manguera. De estos también surge una subdivisión que debes conocer. Por un lado, según el caudal de agua que puedan movilizar, y por el otro, de acuerdo a la distancia entre goteros.
Tubería de riego por exudación: Posee poros que permiten la salida del agua según la humedad que tenga la tierra.
De cinta: Similar a la manguera con goteros incorporados. Su diferencia principal es que solo puede aguantar un ciclo de siembra.
Microtubo: De apenas 4 mm de espesor, se emplea para riegos concretos o para maniobras hidráulicas cuando se trata de riego profesional.

Boquillas y adaptadores para las mangueras flexibles

La boquilla controla en primer lugar, la presión, en otras palabras el caudal, y en segundo lugar, la velocidad con la que el vital líquido se expulsa. Existen de diferentes diámetros de entrada, siendo las más comunes las de 1 y 2 ½ pulgadas. Las primeras manejan 150 gpm de caudal, mientras las segundas unos 250.

En cuanto a los adaptadores sirven para conectar dos o más mangueras, o conectar una a un grifo. Gracias a estos, no solo se puede extender la longitud disponible para el riego, sino también permiten acoplarse fácilmente a diversos sistemas de riego.

Y si te preguntas por los tipos de adaptadores existentes, son tres:

Rosca: Los más tradicionales y que sirven para unir mangueras con diámetros distintos o adaptarse a diversos tipos de grifo.
Clic: Para el fácil y rápido montaje y desmontaje de un sistema de riego provisional.
Con válvula: Ayudan a controlar la cantidad de agua que se expulsa de la manguera. Esto es indispensable para un uso más consciente del vital líquido.

Ahora que conoces lo más relevante sobre la manguera flexible para el riego agrícola, podrás realizar una elección más acertada y ajustada a tus necesidades.